Tenemos un pie en la ciudad, y el otro en la naturaleza. Una aventura al aire libre por la mañana y descubrimientos culturales por la tarde-noche. Los espacios abiertos de los parques se codean con la región de Ottawa, la capital nacional de Canadá. Nuestras tierras son vastas y generosas; nuestros chefs, inspirados y creativos. La región de Outaouais está compuesta por 33.000 kilómetros cuadrados de placer.

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¿Sabías que?
A descubrir absolutamente
El museo más visitado de Canadá, un enorme parque al lado de la ciudad y un pueblo encantador con el chalet de troncos más grande del mundo. Aquí todo se mide a lo grande.
Museo Canadiense de Historia
Su arquitectura es tan impresionante que el museo se puede ver desde lejos, ¡incluso desde Ontario! Bueno, tampoco es tan difícil, ya que se encuentra en la orilla del río Outaouais, frente a Ottawa. Pero de todas formas, suena impresionante. El enorme edificio de curvas color arena evoca nada menos que “la evolución del continente, sus formas esculpidas por el viento, las corrientes de agua y los glaciares”. Según palabras de su diseñador, el arquitecto de origen autóctono, Douglas Cardinal, cuyo trabajo ha ganado varios premios.
El interior es igualmente magistral, especialmente la Gran Galería con sus techos altísimos (no podía ser de otro modo para poder albergar los gigantescos tótems), y sus abundantes ventanas con vistas a la Colina del Parlamento. El museo es tan vasto que también alberga un cine de pantalla IMAX y otro museo, el de los niños, quienes pueden descubrir a los pueblos del mundo mientras se divierten.
El museo tiene la mayor colección interior de tótems del mundo.
Montebello
Se dice que el Château Montebello es el chalet de troncos más grande del mundo. Y es cierto, pero es mucho más que un chalet. Este hotel de la cadena Fairmont es un complejo digno de ese nombre, con la opulencia de su recepción en el bosque y su gastronomía gourmet. Ofrece innumerables actividades al aire libre durante todo el año, al igual que su vecino, Kenauk nature, una de las reservas naturales privadas más grandes de América del Norte.
Cerca de allí, la antigua estación de trenes de Montebello es el hogar de ChocoMotive, la tienda de chocolate y su Economuseo. Y la quesería Montebello bautiza sus quesos artesanales con nombres históricos. ¡Instructiva y deliciosa!
Montebello es el nombre que Lord Louis-Joseph Papineau le había dado a su mansión.
El parque Omega deleita a los amantes de los animales, a los cuales nos podemos acercar en automóvil y a pie por los senderos.